Cuidados del recién nacido desde el primer día
Cuidados del recién nacido desde el primer día
¡Qué rapidez! Ayer había un bebé en camino y hoy ya está en vuestros brazos. ¿Y ahora qué? ¿Cómo cuidar al recién nacido sin que se rompa? Fuera miedos, papás. Desde Nenuco os traemos la guía completa de consejos de cuidados del recién nacido para superhéroes de la paternidad para que vuestro bebé siempre mantenga todo en su sitio con cero peligros.
Guía para el cuidado de tu bebé
¡La que se ha liado…! Que ayer erais dos y uno en camino y hoy la familia ya suma tres y el nuevo ni siquiera sabe cuidarse solito. Pero, no pasa nada, papis. No necesitáis un máster para padres primerizos para cuidar de vuestro bebé recién nacido. Él, el tiempo y la experiencia os irán equipando hasta convertiros en auténticos superhéroes de capa y pañal.
Sabemos que así tan pequeñito y frágil puede dar mucho miedo, pero, ¿os contamos un secreto? Vuestro bebé no se va a romper y lo que hagáis por él siempre estará bien, aunque unos cuantos consejos os pueden ayudar. ¡Aquí van!
Consejos básicos para el cuidado del recién nacido
Ya lo ha hecho: vuestro bebé os ha conquistado desde el primer momento en el que cruzasteis miradas. Y es que vienen así, equipados con dosis extremas de amor. Y ahora, ¿qué cuidados del recién nacido necesita? Hay tanto en lo que pensar… ¡vayamos por partes!
Cómo bañar a tu recién nacido
Si hay un primer momento de auténtico vértigo en el que puedes sentir que tu bebé se puede romper este es el baño, pero, no te preocupes. Lo harás genial, seguirá entero y este momento burbujas en compañía, en el que tú le hablarás cariñosamente, le cantarás y le darás seguridad reforzará aún más vuestro vínculo. ¿Qué debes saber del baño del recién nacido?
- Cuando bañar al recién nacido: lo recomendable es esperar, por lo menos al segundo día de vida para darle su primer baño y que este no dure más de 5 minutitos.
- La temperatura ideal: este bebé ya sabe muchas cosas, pero aún no sabe cómo regular su temperatura corporal. De ahí que prefiera una habitación cálida para bañarse y el agua entre 34º y 37º, sin que le cubra más que las piernas y un poco más del abdomen.
- Qué bien sienta bañarse: el momento de meter al bebé en la bañera es el que más miedo de rotura les da a los papis. Sujétalo con una mano por debajo de la axila y usa la otra para bañarlo suavemente con una esponjita o tu propia mano y sus próximos productos favoritos de bebé, como el Jabón Líquido Ultra Suave, el Baño Hidratante y el Champú Extra Suave.
- Toalla seca-bebés: la parte del secado también es importante. A este bebé le encantan las caricias... también con la toalla. Nada de frotar, mami.
- Momento hidratación: su piel también puede empezar a disfrutar de los efectos de la hidratación que brinda la Leche Hidratante, sobre todo a partir de la primera o segunda semana, que empezará con el proceso de descamación fisiológico.
Cómo alimentar a tu recién nacido
¡Tan pequeñito y siempre con tanta hambre! No es que tu bebé sea un comilón, es que desde que llegan al mundo necesitan alimentarse y dormir mucho. Aquí tienes varias opciones: darle el pecho, darle el biberón o los dos a la vez:
- Lactancia materna: si pruebas a hacer el contacto piel con piel con tu bebé, te llevarás la grata sorpresa de ver cómo repta hasta conseguir agarrarse a tu pecho y empezar a mamar. ¡Qué listo es! No te preocupes demasiado por marcarte horarios para amamantar a tu bebé, la lactancia a demanda, que consiste en darle el pecho cuando el bebé lo pida, suele alimentarlos muy bien, con la frecuencia y la cantidad que necesitan. Al principio, igual necesitas un poco de práctica para darle el pecho y encontrar la postura que más os gusta a los dos, pero, tranqui, mamá. Pronto serás toda una experta en darle de mamar.
- Lactancia artificial: las mamás que no le dan el pecho al bebé, le dan el biberón. Al igual que con el pecho, la lactancia a demanda es una buena opción, dándole el bibe cuando el bebé lo pida y dejándole tomar lo que él decida, sin forzarlo a tomarse todo el biberón y dedicándole mimos y palabras de cariño, igual que si le estuvieras dando el pecho.
- Lactancia mixta: esta consiste en darle el pecho y leche artificial. Los pros son que mamá puede darle el pecho y papá el bibe y puede ser una buena opción al reincorporarse al trabajo. Los contras son que el peque puede rechazar una de las dos formas de lactancia y, además, liarse entre la tetina y el pezón y hacerle un poco de daño a la madre a la hora de mamar.
Cómo cambiarle el pañal a tu recién nacido
Se aproxima otro de vuestros grandes miedos: cambiar el pañal. Toca pasar a la acción, papás, pero, no os preocupéis, vuestro bebé pronto os acostumbrará a esta tarea para que seáis capaces de cambiar el pañal como auténticos expertos sin ni siquiera aguantar la respiración. Claro que este bebé no se anda con bromas y os entrena fuerte desde el primer día, con el meconio, sus primeras deposiciones, que serán vuestros cambios de pañal más duros a lo largo de su etapa de bebé. Una vez superéis esa prueba, todo lo demás será pan comido.
¿Cómo cambiar pañales? De forma resumida:
- Ten todo lo que necesitas a mano: pañales, toallitas húmedas Nenuco y cremita del culete.
- Tumba al bebé boca arriba, agarrándolo de los tobillos.
- Limpia bien la zona genital del peque de delante hacia atrás con una toallita Dermosensitive y aplícale la cremita.
- Despídete del pañal viejo, coloca el nuevo… ¡y ya está!
Cómo prepararle la cunita
El Team Familia ha crecido y su nuevo miembro también quiere su espacio y, dentro de ese espacio, la cunita será el lugar en el que pasará gran parte de su tiempo en los primeros días de vida, de ahí que ya estés buscando cómo preparar la cuna. Claro que, antes de prepararla, es importante que elijas la cuna que más te convenza para él, pues no hay una única opción: un moisés, una mini-cuna, una cuna más grande…
Una vez te has asegurado de que es una cuna segura para tu peque, toca ocuparse de la ropa de la cunita. El algodón es su mejor amigo y el aroma de la colonia Nenuco en la ropita uno de los más agradables que le puedes dar al bebé en su nueva estancia, donde no habrá lazos ni objetos de decoración que se pueda meter en la boca, ni almohadas, pero sí la misma ropita que usarían papá y mamá en su cama, con una chichonera añadida para evitar que estrene los barrotes con un chichón.
Cómo dormir al bebé
Eso que dicen los abuelos de que hay gente que se despierta por tener hambre es muy cierto en el caso de los recién nacidos. Y es que son capaces de dormir hasta 18 horas al día y de despertarse solo porque quieren comer, aunque, si ves que el tuyo se pasa de dormilón, intenta despertarlo cada 3 o 4 horas… Necesita comer, ya dormirá (y dormiréis) más tiempo seguido cuando vaya creciendo. A la hora de dormir, túmbalo boca arriba, nunca de costado ni boca abajo, para prevenir la muerte súbita del lactante y déjalo que duerma solito, sin peluches ni juguetes que puedan bloquear sus vías respiratorias. ¿Y ahora? ¿Cómo dormir al bebé? No pasa nada porque acunes a tu bebé en tus brazos, aunque sí puede ser bueno para él que le permitas terminar de dormirse en su cuna para que entienda que ese es su espacio para dormir y pueda volver a dormirse solito cuando despierte por la noche. Crear una rutina para dormirlo también puede seros de gran ayuda a la larga.
Los cuidados de papá y mamá
Los protagonistas de realizar todos estos cuidados al bebé deben estar en condiciones para cumplir con las misiones que demanda el nuevo miembro de la familia. Pero, ¿cómo dormir con un bebé que no para de llorar y requiere atención constante? Intentando descansar cuando él también lo hace. Y, ¿sabéis qué más necesitáis? Alimentaros bien, cuidaros, seguir disfrutando de vosotros… en definitiva, seguir siendo los que erais, pero ahora con un plus de superpoderes de papás. ¿Y tú? ¿Qué otros consejos para los cuidados del recién nacido conoces? ¡Compártelos en nuestras redes sociales con el hashtag #YoSoyElPadreQue #YoSoyLaMadreQue… se acaba de estrenar en no dormir y no llorar!